En las dos primeras instancias del Poder Judicial a Memo, como cariñosamente lo llaman sus adeptos, o “Ché” como le dicen sus camaradas, fue absuelto de pertenecer a los remanentes en la selva del VRAEN de la banda criminal de “Sendero Luminoso”, que ahora se dedican brindar protección al narcotráfico y de vez en cuando hacer alguna actividad subversiva, para decir que aún están vivitos y coleando. Pero en la tercera y definitiva instancia, el caso fue revisado a conciencia con las respectivas pruebas, filmaciones, testigos, por lo que la justicia falló a favor del Ministerio Público, condenando a Guillermo Bermejo Rojas, quien laboraba como “padre de la patria” en el Congreso de la República a 15 años de cárcel.

Memo o el Ché, quien viene de esa izquierda radical en la que considera que esto de las “elecciones” son “pelotudeces democráticas”, que si el llegaba al poder, no lo soltaba, como los Castros en Cuba, los Chávez y Maduros en Venezuela, la pareja presidencia los Ortega en Nicaragua, lo que Petro en Colombia si o si lo está intentando con una nueva constitución; así mismo como después de casi dos décadas en Bolivia el MAS de Evo Morales y Arce perdieron ante una derechización electoral, cansados del desabastecimiento de productos importados al carecer de divisas para comprarlos.

Los hinchas de Guillermo Bermejo claman justicia, que él no es lo que él mismo ha demostrado que es, un petardeador de la democracia boba, que si llegaba a ser presidente, nunca saldría del poder, bueno, se fue de boca, la derecha y los “caviares”, sobre todo estos últimos le bajaron el dedo, un peligro para el “status Quo”, lo más curioso que el ahora condenado reo, tenía gustos un poco más sofisticados, porqué con su estatus de congresista sólo tomaba buenos licores, hacía buenos viajes a las Europas y hasta su matrimonio fue en un exclusivo club al sur de Lima, cosas de la vida.

La única esperanza para salir libre, al igual que el prosor Pedro Castillo, es que salga un gobierno afín a sus ideas y les brinden el tan despreciado indulto, negado un sin número de veces al “Chino” Fujimori. No soy pitoniso, ni adivino, porqué en el Perú todo puede suceder, no aprendemos de las experiencias de los países en donde la izquierda gobernó, y de los últimos gobernantes de izquierda que tuvimos, incluyendo a La Dina, porqué de derecha nunca fue, tenía todas las características que adquiere un político zurdo, lo primero que hizo fue llevar joyas de lujo, arreglarse la cara, viajar y viajar, tomarse selfis con los presidente mediáticos, mejor dicho, hacer las cosas que criticaba, pero cuando llegó al poder se olvidó que las vacas algunas vez fueron terneras.

En el Perú, en política nada está dicho, en la mañana eres un presidente o presidenta, congresista, ministro y por la tarde estas yendo a una cárcel como cualquier hijo de vecino, mejor dicho, cuando estés arriba recuerda que eres un simple mortal, así que pórtate bien, para que cuando te vaya mal, por lo menos vas a tener la esperanza que alguien que te lleve los cigarrillos y te visite en la cárcel,  aparte de tu mamá.

Lima, 27 de octubre del 2025.